Desde hace varios años la Supercopa de Italia se disputa fuera de su país, pero en ningún caso la Liga de Fútbol Italiana imaginaba que la próxima final de la Supercopa entre el Milán y Juventus, a disputar en Arabia Saudí iba traer tanta polémica.
Y es que las aficionadas italianas descubrieron asombradas que no podían acudir solas al encuentro, sino era acompañadas por un hombre, en una Sociedad donde la mujer vive en unas situaciones de discriminación alarmantes, en el que hasta hace poco se las restringía la conducción de vehículos o incluso el pasear sola por vía pública.
Siendo la monarquía saudí uno de los regímenes que además de invertir sus millones de petrodólares en clubs de fútbol europeos, también exporta el fundamentalismo religioso más radical en Oriente medio y occidente, siendo un importante aliado de EEUU e Israel.
Por lo que resulta indignante que mientras los gobiernos europeos condenaron gobiernos laicos como Libia, Siria o Irak, colabore con las tiranías extremistas de Arabia Saudí, Kuwait o Qatar, sobre todo tras el asesinato del periodista Jamal Khashoggi y por la degradación de los Derechos Humanos.
Luis Cortés
somospueblo.net 
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